Las crisis recientes han tenido una fuerte repercusión sobre la oferta y la demanda, poniendo de relieve lo difícil que es predecir el volumen de mercancía necesario para mantener la actividad de su negocio. Veamos cómo el sector minorista puede adaptarse a esta nueva realidad y agilizarse.
Para hacer frente a la incertidumbre, las cadenas de suministro tienen que aumentar progresivamente su flexibilidad para reaccionar mejor ante posibles imprevistos. Se necesitan ampliaciones y reducciones rápidas y sencillas, así como la existencia de un plan B alternativo, para asegurarse de tener las existencias adecuadas en el momento exacto. ¿Cómo puede seguir el mismo camino y agilizar su cadena de suministro?
Automatizar procesos cuando sea posible
Para permitir unas reacciones rápidas y flexibles a las necesidades cambiantes del mercado, tanto del lado de la oferta como del de la demanda, es necesario crear procesos repetibles en los que poder confiar. Estos se pueden automatizar para mejorar su eficiencia y evitar costosos errores (humanos).
Sea cual sea el cambio en ciernes, estos procesos automatizados deben ser lo suficientemente robustos como para seguir las necesidades del mercado con el clic de un botón.
Obtener datos y usarlos con inteligencia
Todos los negocios minoristas de hoy, tanto físicos como online, tienen acceso a montones de datos, no solo sobre existencias, ventas y precios, sino también sobre tendencias y hábitos de los clientes. Gracias a los desarrollos tecnológicos, es posible combinar y analizar grandes cantidades de datos, que pueden orientar sobre la forma de gestionar una colección, tanto en surtido como en estacionalidad.
Esto permite a los minoristas tomar decisiones informadas rápidas cuando surgen alteraciones inesperadas. Unas herramientas de datos y de análisis mejores nos permiten también unas predicciones más precisas y unas relaciones más sólidas con los clientes.
Incluir a proveedores y clientes en las operaciones
Una cadena de suministro se agiliza cuando se establecen líneas de comunicación directas con todas las partes interesadas, desde los proveedores hasta los clientes. Cuando se trabaja en colaboración, interna y externamente, se pueden optimizar las operaciones.
Compartir información sobre disponibilidad y entregas, basar las decisiones en las necesidades del cliente y permitir cierta flexibilidad se traducirá en que cada uno sepa qué esperar. Solo teniendo en cuenta las necesidades y posibilidades de cada uno, tendrá la capacidad de alcanzar los resultados más satisfactorios para todo el mundo.
Trabajar con socios fiables
Escoja sus proveedores en función de su capacidad para ajustarse a demandas fluctuantes para adaptarse y reaccionar más fácilmente a los cambios a corto plazo en su negocio. Una estupenda estrategia de mitigación es trabajar con un proveedor textil que tenga stock en Europa. Esto permite pedidos más pequeños, tiempos de entrega reducidos, precios estables y una garantía de calidad que también le ayudará a proteger su reputación.
Un socio como B&C, por ejemplo. Con más de 25 años de experiencia en el abastecimiento de prendas en Asia, trabajando con un pequeño número de fábricas cuidadosamente seleccionadas y con enormes stocks en Europa que se pueden entregar en 48 horas, no necesitará acumular existencias.
Sea flexible, adáptese a las necesidades de sus clientes y mantenga saneado su negocio.